Confirmación de compatibilidad
mayo 7, 2013Entrevista a Martín Cherres Colmenares, gerente general de NASAM
mayo 20, 20139 de Mayo 2013: parte desde Italia hacia Piura la «Casa Primera NASAM» les contamos de que se trata…
En estos momentos viajamos con la esperanza y la imaginación para mantener viva la llama de la condivición internacional, precisamente globalizando las esperanzas de un equipo de trabajo que esta formándose.
Nada mejor que hacerlo a través de un container en hierro! Justamente un container, si!! El común denominador de cada dia de nuestro trabajo, el emblema por excelencia de nuestro sudor cotidiano. Estas cajas metálicas que van y vienen por los océanos.
En este caso llevando fertilizantes desde Italia hacia Perú, devolviendo su contenido en forma de sabrosa y solidaria fruta orgánica Fair Trade.
Una metáfora de nuestras vidas esta «Casa Primera NASAM», un container 40′ viejo modelo (1992) a fin de su ciclo de vida el cual fue reciclado, recuperadolo a la actividad, reforzándolo y adáptandolo a un nuevo uso no solo con una simple pintada externa sino con un equipamiento que lo transforma en una moderna oficina de 32 m2 con toda la tecnología de avanguardia.
Revestimiento de pisos en madera reciclada, sistema de aire acondicionado a bajo consumo inverter, dos funcionales servicios higiénicos sin olvidar un cableado integral de toda su superficie posibilitando la trasmisión de datos satelitales en medio a amoblamiento original. En síntesis una cómoda oficina para que desde la Región Piura 3 personas puedan coordinar las actividades cotidianas en estrecha relación con el staff italiano.
Sigue entonces desde lados opuestos del mundo, la tarea de construir «puentes verdes» para un mundo posible mendiante la lucha por la defensa de la tierra buscando lograr una agricultura sustentable donde confluyen hombre y naturaleza.
Sentir que vamos paso a paso consolidándonos como empresa, darnos cuenta que solo la verdadera unión entre las personas puede llevar a resultados importantes. Comenzando entonces por lo pequeño vemos con ojos de asombro un container que desplega sus sombrillas externas de sol como alas a través de las cuales, si unidas, podran hacer volar mundos tan lejanos dentro de uno solo.
